En el municipio de Consuegra lo más destacado son sus preciosos molinos de viento, en gran parte por su belleza y la particular batalla que lidió Cervantes en su libro Don Quijote. Pero más allá de esta arquitectura construida en el siglo XIX para moler harina, la localidad ubicada en la provincia de Toledo, Consuegra ostenta varios monumentos y edificios históricos que merece la pena comentar.

Castillo de Consuegra

Además de los famosos molinos de viento, el castillo de Consuegra comparte protagonismo siendo el monumento más importante. Con más de ochocientos años de antigüedad, esta fortaleza es gran singularidad y atractivo por su dilatada historia y arquitectura vinculada estrechamente con la Orden de San Juan de Jerusalén.

Aunque los orígenes de este castillo se remontan a una fortaleza musulmana de periodo califal (siglo X), el aspecto que apreciamos hoy en su estructura es debido a la impresionante obra de arquitectura militar que los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén pusieron en pie, tras la cesión por Alfonso VIII de la antigua fortificación y el alfoz de Consuegra a la Orden.

Cabe destacar que este castillo se encuentra en el Cerro Calderico, una crestería rocosa que se alza por encima de la llanura manchega y consta de tres recintos defensivos y se ha restaurado en las últimas décadas.

Pero este cerro es conocido sobre todo porque alberga doce de los trece molinos de viento tradicionales que tuvo, todos ellos bautizados con nombres extraídos de la inmortal obra del Quijote. Cuatro de ellos conservan en buen estado la maquinaria. Destaca el Molino Sancho, del siglo XVI, escenario de la Fiesta de la Rosa del Azafrán de Consuegra.

Arco de la Plaza-Torre del Reloj y arquitectura religiosa

Representa el gran símbolo de la historia de la ciudad. Sobre el propio arco de la plaza de España de Consuegra se encuentra el reloj desde 1820. Además, de esta arquitectura renacentista se encuentra una amplia representación de arquitectura religiosa como la ermita del santísimo Cristo de Veracruz, con su fachada de mármol blanco; la iglesia parroquial Santa María la Mayor, con su cripta mudéjar; el Convento de las Madres de la Inmaculada Concepción, que recrea el gótico mudéjar.

Ermita del Santo Cristo de la Vera Cruz

Uno de los templos más queridos por los ciudadanos de Consuegra, ya que acoge la figura del patrón. Este edificio barroco levantado a finales del siglo XVIII se construyó sobre un solar de la antigua ermita derruida al ser un edificio hecho de tapial.

Iglesias de Consuegra

Las iglesias que se encuentran en Consuegra son las siguientes: Iglesia parroquial de San Juan Bautista,  Iglesia de San Rafael y Santa María la Mayor. Hasta 1567 solo tuvo la parroquia de Santa María la Mayor, pero debido al aumento de población se consideró necesario construir otra parroquia. La iglesia de San Rafael se encuentra en el barrio de El Imparcial y es de estilo-castellano-mudéjar. Su arquitecto fue Ortiz de Villajos y también fue artífice, junto a su hermano, de diseñar este barrio de Consuegra. Por último la iglesia parroquial de Santa María la Mayor se ubica en San Antonio y en su fachada aparece la fecha de 1723 en la que se indica que los frailes construyeron el edificio para poder trasladarse desde el convento de San Pedro de la Vega hacia el interior de la ciudad.

Durante su visita se recomienda hacer una parada casi obligatoria para todos los que pasan por aquí como es el restaurante Abrasador Canela y Limón, que se encuentra engalanado de una forma peculiar y haciendo honor a su nombre, en el que son especialistas en platos de la comarca además de contar con una carne a la brasa de crianza propia.